Cuando eras una niña
yo te hice una promesa
tú has olvidado todo
y yo nunca he crecido.
Por favor, no prosigas
tu visión me hace daño
estoy solo y perdido,
como siempre lo he estado.
Debajo de la lluvia
yo cantaba tu nombre
y en pobres garabatos
yo plasmaba tus rasgos.
Sangrábanme las yemas
por no tener tu pelo
como ahora los labios
se muerden en silencio.
martes, 5 de abril de 2011
No escuches el silencio
Cuando mi nombre se disuelva en el agua
y su rostro es todo lo que veas
Cuando te arranque un jadeo entre las sábanas
y te aferres a su piel inamovible
No escuches el silencio.
y su rostro es todo lo que veas
Cuando te arranque un jadeo entre las sábanas
y te aferres a su piel inamovible
No escuches el silencio.
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